Y justo cuando creía (y festejaba) que habías salido de mi mente, te encontré dormido en algún pensamiento perdido que llegó y se quedó instalado en el medio de mi inspiración. Evidentemente es más difícil borrarte de lo que imaginé. Posiblemente olvidarte sea una cuestión de tiempo, de creer o de fe, ya no sé. Apareces cuando no te busco ni te espero, pero no puedo verte si eso es lo que quiero, tu recuerdo esta jugando conmigo a las escondidas pero hace rato dejé de contar y de buscarte esperando algo más. Estás tan presente en mi vida como en aquellos días que creí amarte, cuando creí que te sentía; y es tan fuerte la sensación de que estas acá todavía como lo era en esos momentos que llegue a pensar que te importaba...y que me querías. Seguis estando en todas partes, en todos esos lugares en los que te dejé para olvidarte, seguis apareciendo como una imágen que no puedo borrar, que volvió para quedarse, seguís estando presente en cada latido aún cuando ya no estas más. Quiero despertar y pensar en todo, en cualquier cosa menos en vos. Quiero despertar y que te hayas ido para poder sentir y convencerme de seguir recorriendo mi camino.
Si no salis de mi mente, no puedo soñar.
Si no salis de mi corazón, no puedo volar.
